LA MEDITACIÓN DE LA ROSA MÍSTICA: OCTUBRE 2013
"El símbolo de la Rosa Mística es que si un
hombre cuida de la semilla con la que nace, si le da el suelo apropiado, si le
da la atmósfera y vibraciones apropiadas, si va por el camino correcto, donde
la semilla pueda comenzar a crecer, entonces el crecimiento supremo se
simboliza como una rosa mística; cuando tu ser florece, abre todos sus pétalos
y libera su bella fragancia."
El 21 de abril de 1988, Osho introdujo una nueva
terapia meditativa llamada "La meditación de la Rosa Mística". La
meditación es así: una semana de risas por tres horas al día, una semana de
llanto por tres horas al día y una semana de presenciar por tres horas al día.
Desde entonces miles de personas han participado en la Meditación de la Rosa
Mística en la Columna de Osho en Poona, India, y en los centros de meditación
de Osho alrededor del mundo.
Estudios científicos realizados durante y después
de los veintiún días del ciclo de meditación, revelan que los participantes
experimentan cambios profundos y permanentes en varias dimensiones de sus
vidas. éstos incluyen una relajación interna más profunda, mejoran en una
amplia variedad los cuadros psicosomáticos, y una mayor habilidad para sentir y
expresar las emociones en la vida diaria, y al mismo tiempo estar desidentificados
de ellas, llegando a ser testigos de sus propias experiencias.
Para aquellos que quieran ir más profundamente, he
creado una terapia meditativa. La primera parte va a ser risa, por tres horas
la gente se ríe sin ningún motivo, y cada vez que la risa comienza a disminuir,
otra vez dicen "¡Yaa-Jú!" y regresará. Excavando por tres horas, te
sorprenderás de cuántas capas de polvo se han acumulado sobre tu ser. Las
cortarás como con una espada, de un solo golpe. Por siete días, continuamente,
tres horas cada día... no te puedes imaginar cuánta transformación puede llegar
a tu ser.
Y a continuación la segunda parte son lágrimas. La
primera parte impide todo lo que impide tu risa, todas tus inhibiciones desde
la antigua humanidad, todas las represiones, las extirpa. Trae una nueva
dimensión dentro de ti. Pero aún tienes que ir unos cuantos pasos más para
alcanzar el templo de tu ser, porque has reprimido tanta tristeza, tanta
desesperanza, tanta ansiedad, tantas lágrimas, todo eso está ahí dentro, cubriéndote
a ti y destruyendo tu belleza, tu gracia y tu dicha.
En la antigua Mongolia tenían la idea de que en
cada vida, todo dolor era reprimido... y el dolor es reprimido, porque nadie lo
quiere. Tú no quieres estar dolorido, así que lo reprimes, lo evitas, miras a
alguna otra parte y ello permanece. Y la idea de los mongoles era, y yo estoy
de acuerdo con ella, que vida tras vida continúa acumulándose dentro de ti, se
convierte casi en una dura costra de dolor. Si vas hacia adentro encontrarás
ambas, risa y llanto. Por eso es que a veces sucede que riéndote,
repentinamente, las lágrimas comienzan a fluir al mismo tiempo. Confunde mucho,
porque normalmente pensamos que son opuestas. Cuando estás lleno de lágrimas no
es tiempo de reír, o cuando te estás riendo no es la estación apropiada para
las lágrimas. Pero la existencia no cree en tus conceptos e ideologías; la
existencia trasciende todos tus conceptos, que son dualistas, que están basados
en la dualidad. Día y noche, risas y lágrimas, dolor y bienaventuranza, ambos
llegan juntos.
Cuando un hombre alcanza su ser más profundo,
descubrirá que la primera capa es de risas, y la segunda es de agonía, de
lágrimas.
Así que por siete días permítete llorar, derramar
lágrimas sin ningún motivo, simplemente que las lágrimas están listas a salir.
Tú las estás impidiendo, sencillamente no las impidas, y cada vez que sientas
que no salen, di sólo "¡Yaa-Bú!". éstos son los sonidos puros, usados
como una técnica para sacar toda tu risa y todas tus lágrimas y limpiarte
completamente, para que puedas llegar a ser inocente como un niño.
Finalmente, la tercera parte es ser un testigo, el
observador en la cima. Finalmente, después de la risa y las lágrimas, sólo hay
un testigo silencioso. El ser testigo por sí solo, es automáticamente
represivo. El llanto se detiene cuando eres testigo, se duerme. Esta meditación
se deshace de la risa y las lágrimas de antemano, así que no hay nada que
reprimir cuando está el testigo. Entonces al ser testigo, simplemente se abre
un cielo limpio. Así que por siete días experimentas simplemente una claridad.
Esta es absolutamente mi meditación.
Te sorprenderás que ninguna meditación te pueda dar
tanto como esta pequeña estrategia. ésta es mi experiencia de muchas
meditaciones, que lo que se tiene que hacer es romper dos capas en ti. Tu risa
ha sido reprimida; se te ha dicho: "No te rías, es un asunto serio".
No se te permite reírte en una iglesia, o en una clase universitaria...
Así que la primera capa es de risa, pero una vez
que la risa termina, repentinamente te sentirás inundado de lágrimas, de
agonía. Pero ése también será un gran fenómeno de descarga. Muchas vidas de
dolor y sufrimiento desaparecerían. Si te puedes deshacer de esas dos capas, te
has encontrado a ti mismo.
No hay significado en las palabras
"Yaa-Bú" y "Yaa-Jú". Simplemente son técnicas, sonidos que
pueden ser usados para cierto propósito, para entrar en tu propio ser.
He inventado muchas meditaciones, pero tal vez ésta
sea la más esencial y fundamental. Puede posesionarse de todo el mundo...
Toda la sociedad ha hecho tanto daño al impedirte
todas tus alegrías y todas tus lágrimas. Si un hombre de edad comienza a
llorar, tú dirás: "¡Qué estás haciendo!, deberías avergonzarte, no eres un
niño, que alguien te quitó un plátano y te has puesto a llorar. Toma otro
plátano pero no llores".
Simplemente mira, ponte de pie en la calle y
empieza a llorar, y la muchedumbre se congregará a consolarte: "¡No
llores! Lo que haya sucedido, olvídalo, ya sucedió". Nadie sabe lo que ha
sucedido, nadie te puede ayudar, pero todo el mundo tratará. "¡No
llores!". Y la razón es que si tú continúas llorando, entonces ellos
comenzarán a llorar, porque ellos también están inundados de lágrimas y esas
lágrimas están muy cercanas a los ojos...
Y es saludable llorar, reír. Ahora los científicos
están descubriendo que el llanto y la risa son inmensamente saludables, no sólo
físicamente, sino también psicológicamente. Son muy capaces de mantenerte sano.
Toda la humanidad está un poco loca, por la sencilla razón que nadie se ríe
completamente, porque en todas partes hay gente que dirá: "¡Qué estás
haciendo! ¿Eres un niño? ¿A esa edad? ¿Qué pensarán tus niños? ¡Quédate tranquilo!".
Si lloras y derramas lágrimas sin ninguna razón,
sólo como un ejercicio, como una meditación... nadie lo creerá. Las lágrimas
nunca han sido aceptadas como una meditación. Y te digo, no son sólo una
meditación, son también una medicina. Tendrás mejor visión y tendrás también
mejor visión interna.
Te estoy dando una técnica muy fundamental, fresca
y sin uso. Y va a extenderse por todo el mundo, sin ninguna duda, porque sus
efectos le mostrarán a cualquiera que la persona ha rejuvenecido, que se ha
hecho más amorosa, que tiene más gracia; se ha hecho más flexible, menos
fanática. La persona se ha hecho más alegre, con más celebración.
Todo lo que este mundo necesita es una buena
limpieza del corazón, de todas las inhibiciones del pasado. Y la risa y las
lágrimas pueden hacer ambas. Las lágrimas te sacarán toda la agonía que está
escondida dentro de ti, y la risa te sacará todo lo que impide tu éxtasis. Una
vez que hayas aprendido el arte, te asombrarás inmensamente. ¿Por qué esto no
ha sido dicho hasta ahora? Hay alguna razón: nadie ha querido que la humanidad
tenga la frescura de una rosa, ni su fragancia, ni su belleza.
He llamado a esta serie de charlas "La Rosa
Mística". "¡Yaa-Jú!" es el mantra para traer la Rosa Mística a
tu mismo centro, para abrir tu centro y liberar tu fragancia, y la Rosa Mística
es la realización de tu ser interno.
"¡Yaa-Jú!" Un sonido de celebración
Ninguna palabra tiene significado por sí misma. Los
significados son dados, son arbitrarios; de otro modo cada palabra es sólo un
sonido sin sentido. Pero podemos darle significado a cualquier sonido, y el
sonido se convierte en una palabra cuando le damos un significado. A veces el
significado es muy importante y a veces no; la mayor parte del tiempo no es
importante, es arbitrario, útil, pero no existencial. Por lo tanto, los
lenguajes no consisten en palabras existenciales. Por ejemplo, "Om"
no tiene significado, o es parte de ningún alfabeto, pero tiene un propósito
existencial: provoca en ti el sonido de lo eterno... Es algo similar al sonido
de la misma existencia, no exactamente lo mismo, un eco lejano, pero de todas
maneras representativo.
Del mismo modo es la palabra "¡Yaa-Jú!".
Ju es una antigua práctica de los sufís. Ellos han descubierto que en vez de
repetir el mantra "Allah", repitiendo "Allah-Jú" te ayuda a
ir más profundo dentro de ti. Y alguien encontró en el camino que ni siquiera
hay necesidad de decir "Allah-Jú", sólo el Jú cumple el propósito,
porque este sonido golpea dentro de tu ser. Solo repitiendo "Jú" una y
otra vez te sorprenderás, has dejado tu mente muy lejos, tus pensamientos han
cesado, el tiempo ha desaparecido y has entrado en un espacio que es tuyo, pero
del cual nunca has estado consciente. He unido al "Jú" con el
"Yaa" porque es mi sentir que "Jú" ciertamente funciona,
pero es serio. Te centra, pero en tu centro no hay risa, no hay danza.
Ciertamente el botón florece, pero no hay fragancia. El sonido "Yaa"
hace el trabajo, hace a la palabra "Jú" completa y total.
"¡Yaa-Jú!" no sólo golpea tu centro, tu mismo ser, sino que también
trae un tremendo sentimiento de alegría, una risa, una danza; es celebración.
Simplemente repitiendo "¡Yaa-Jú!" te
sorprenderás, no te vas volviendo triste y serio, como los sanos están
supuestos a ser, sino que una dimensión totalmente nueva comienza a abrirse: el
santo reilón, el dios saltarín. "¡Yaa-Jú!" es sólo una expresión
representativa de un ser que ríe y danza.
Instrucciones
Esta meditación es en tres partes, con una duración
de 21 días; puede ser hecha también solo.
1) Instrucciones para la risa "La risa
auténtica no tiene un motivo. Simplemente surge en ti como una flor florece en
un árbol. No tiene motivo, no hay explicación racional. Es tan misteriosa, de
ahí el símbolo de la Rosa Mística".
Por siete días comienza gritando
"¡Yaa-Jú!" unas cuantas veces, luego simplemente ríe sin ningún
motivo por 45 minutos. Puedes sentarte o echarte; algunas personas sienten que
echándose de espaldas, las ayuda a relajar los músculos del estómago y permite
que la energía se mueva más fácilmente. El énfasis es en encontrar tu risa
interna, risa sin ningún motivo, así que tus ojos están generalmente cerrados;
sin embargo algún contacto visual con tus amigos para desencadenar la risa
también está bien.
Deja que tu cuerpo se balancee en una manera
risueña y juguetona, con la inocencia del niño dentro de ti y permítete a ti
mismo reírte con totalidad. Por momentos puedes encontrarte con bloqueos que
han estado ahí por siglos, impidiendo tu risa. Cuando suceda esto, grita
"¡Yaa-Jú!" o emite sonidos sin sentido hasta que la risa comience de
nuevo.
Al final de la etapa de risa, siéntate
perfectamente quieto, con los ojos cerrados, por unos cuantos minutos. El
cuerpo está congelado como una estatua, acumulando toda la energía dentro.
Entonces relaja el cuerpo completamente y permítete caer sin ningún esfuerzo ni
control, y cuando te sientas listo, siéntate otra vez y hazlo en silencio,
observando por quince minutos.
2) Instrucciones para el llanto
Para la segunda semana, comienza diciendo:
"¡Yaa-Bú!" suavemente unas cuantas veces, luego simplemente permítete
a ti mismo llorar por 45 minutos. Puede ser que prefieras tener la habitación
ligeramente a oscuras, para ayudarte a entrar en tu tristeza; puedes sentarte o
echarte. Cierra los ojos y entra profundamente en todos los sentimientos que te
hacen llorar.
Permítete llorar en forma realmente profunda,
limpiando y descargando el corazón. Siente que la represa de todas tus heridas
y sentimientos reprimidos está rompiéndose, deja que tus lágrimas te inunden.
Si te sientes bloqueado o con sueño después de llorar un rato haz sonidos sin
sentido. Balancea un poco el cuerpo hacia atrás y adelante o di
"¡Yaa-Bú!" de nuevo por unas cuantas veces; las lágrimas están ahí,
sólo no las impidas.
Al término de la etapa del llanto cada día,
siéntate perfectamente quieto por unos cuantos momentos y luego relaja el
cuerpo completamente y permítete caer sin ningún esfuerzo ni control, y cuando
te sientas listo, siéntate otra vez y hazlo en silencio, observando por quince
minutos.
Durante esta semana del llanto, debes estar abierto
a cualquier situación que pueda traer lágrimas; permítete estar vulnerable.
3) Instrucciones para el Observador de la cima
Para la tercera semana, siéntate en silencio por
cualquier período de tiempo que te sea cómodo y luego baila con música que
toque el corazón. Puedes sentarte en el piso o usar una silla; tu cabeza y
espalda deben estar tan derechas como sea posible, tus ojos cerrados y tu respiración
natural.
Relájate, sé consciente, conviértete en el
observador en la cima de una colina que simplemente observa lo que le suceda.
Meditación es el proceso de observar, lo que estés observando no es importante.
Recuerda no identificarte o extraviarte con cualquier cosa que suceda:
pensamientos, sensaciones corporales, sentimientos, juicios.
Luego de sentarte, pon alguna música suave de tu
preferencia y baila; permite que el cuerpo encuentre su propio movimiento y
prosigue observando mientras te estás moviendo, no te pierdas en la música.
4) Algunos consejos
Durante el período de 21 días es preferible no
realizar otras meditaciones o sesiones catárticas.
Si estás haciendo la meditación Rosa Mística con
amigos, no habléis unos con otros durante la meditación.
Mucha gente se encuentra en un nivel de ira durante
la semana de risa o la semana de llanto; no hay necesidad de quedarse estancado
ahí. Deja que se exprese haciendo sonidos sin sentido y movimientos corporales
y después vuelve a la risa o el llanto.
¡Celebra tu risa! ¡Celebra tu llanto! ¡Celebra tus
momentos de observación silenciosa!
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